martes, 18 de mayo de 2010

Una pierna nueva

Mastico folios, ¿qué haces tú?
Se acaba de comprar una pierna nueva y la exhibe orgulloso entre sus amigos. Dice que en ésta podrá meter aún más fajos de billetes. En la otra sonaba la calderilla y le pesaba más de lo normal. En ocasiones iba arrastrándola. Ahora tiene una pierna nueva y quiere también una mujer nueva. Una mujer para cuidar y llevar al cine y al baile y a las fiestas de agosto. Quiere una novia ahora que tiene una pierna de verdad. Un pierna de verdad y una novia de verdad, eso es lo único que quiere. No un estúpido trabajo con un jefe estúpido, con un compañero estúpido con un horario estúpido. No una casa donde no haya cajas que llenar. Ahora tiene una pierna y va a conseguir una mujer. Es lo único que necesita, lo jura.

3 comentarios:

M dijo...

A la pierna hay que ponerle un gorrito, como esas señoras mullidas que pasean a sus yorkshire con un abriguito de lana cuando empieza el frío.

Una pierna con gorrito enamora a cualquiera.

Igor dijo...

Dejando las piernas a un lado, y sus muchos significados, su metáfora atroz, otra vez me sorprendes con estos retratos de la vida, de lo que pesa, de lo que no pesa. El qué es lo que quiere, esa novia, esos bailes de agosto, cines,,, No un trabajo estúpido.
¿Dónde dan piernas nuevas y nuevas vidas, nuevas ideas?

Espérame en Siberia dijo...

¡Que tenga mucho, muchísimo éxito!